Hemos decidido realizar nuestra propia traducciรณn de las conocidas resoluciones de Jonathan Edwards. Estas determinaciones procedieron de un corazรณn deseoso de agradar a Jesucristo, y bien deberรญan ser imitadas por quienes poseemos similar inclinaciรณn.
Esperamos que cada uno de aquellos que las lee pueda observar su valiosa utilidad y, dependientes de la gracia del Seรฑor, puedan hacer de estas resoluciones sus propios compromisos de vida.
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POR FE Y PARA FE 